La evolución del Carpfishing desde sus comienzos a finales de los años 70, hasta nuestros días, sin duda ha sido extraordinaria en todos sus aspectos. Técnicas, estrategias, cebos, equipación…pero sobre todo en lo que respecta a materiales de construcción y elaboración de artículos y accesorios que  facilitan hoy día la afición del pescador de carpas. En lo que hoy nos atañe, el tema de los bajos que utilizamos para nuestras sesiones de pesca, esta evolución también se a hecho notar; desde aquellos primeros filósofos de la pesca de la carpa que idearon el sistema “Hair”, aquellos primeros “hairrig” con pelo natural, hasta los montajes avanzados más novedosos que nos van presentando los pescadores más afamados y las marcas punteras del mercado. Sin embargo el concepto sigue siendo el mismo, se trata de presentar a los peces nuestro cebo de la forma más natural posible, sin que este sea pinchado en el anzuelo para no generar desconfianza a la hora de tomar el engaño, por este motivo se empezó a utilizar el ”aparejo hair”.

   Actualmente se conocen infinidad de formas de elaborar un bajo, existen multitud de bajos contrastados y probados, que realmente funcionan bien, se realizan pruebas, se filma a las carpas en su medio natural, se observa como comen, y se actúa en consecuencia, pero realmente debemos de conocer y saber elaborar todos estos tipos de bajos diferentes, creo que la respuesta seria que no, simplemente con unos pocos montajes básicos adaptados a cada situación de pesca seria más que suficiente, saber lo que utilizamos en cada momento y porque lo hacemos, en este punto repasaremos diversos factores que nos condicionaran a la hora de decidirnos por un bajo u otro.

   Antes de entrar en materia, creo que es conveniente e importante exponer los diferentes materiales con los que elaboraremos nuestros montajes, ya que estos nos proporcionaran bajos de diferentes características, dependiendo del material que utilicemos. El elemento más popularmente utilizado para la realización de bajos por los pescadores de carpfishing, es sin duda el trenzado, tiene la ventaja de ser muy resistente a la abrasión en diámetros finos, a la vez que dócil y flexible, un bajo de trenzado mostrara un cebo a las carpas completamente natural, sin embargo podrán expulsarlo tan fácilmente como fue tomado sin que nosotros ni siquiera nos enteremos debido a su flexibilidad, además de esto tiene tendencia a enredarse, por lo que deberíamos tener en cuenta otras opciones. Cada vez con más adeptos, podemos fabricar nuestros bajos con fluorocarbono, el fluorocarbono muy parecido al nylon, se hace invisible en el agua a los ojos de las carpas, y lo más importante respecto del trenzado es la rigidez que aporta el fluorocarbono a nuestros bajos (A mayor diámetro mas rigidez) haciendo muy difícil que la carpa una vez tomado el cebo expulse el anzuelo de su boca, no obstante se nos presenta un inconveniente grave, debido a esa rigidez, el cebo no se comportara de una forma tan natural como motado en un trenzado flexible, para paliar esta situación, podemos realizar bajos combinados, lo que conocemos por “Combi-rig”. Este tipo de bajos nos dará lo mejor de cada material, por este motivo se crearon los trenzados híbridos o recubiertos, se trata de trenzado flexible con una cubierta rígida la cual puede ser eliminada en parte, para fabricar nuestro bajo combinado, En estos trenzados híbridos es conveniente apostar por la calidad de marcas contrastadas, y evitar las imitaciones o materiales de baja calidad, para conseguir buenos resultados.

 Conocemos ya los materiales y las características que nos aporta cada uno de ellos, en este punto quiero enlazar este artículo con el anterior donde os presentaba la Charca de Monte la Reina en Zamora  como escenario de pesca, y exponer mis bajos y montajes preferidos para pescar allí, el  factor  más importante que debemos de tener en cuenta cuando afrontamos un escenario nuevo de pesca, es conocer el tipo de fondo donde van a reposar nuestros cebos y montajes, para una correcta presentación de los mismos.

En esta ocasión hemos hablado de fondos limpios y regulares, carentes en su totalidad de cualquier tipo de vegetación, solo algunas acumulaciones de fango de algunos centímetros en algunos puntos muy concretos de la charca, donde cambiaremos el tipo de cebo fondante por uno ligeramente suspendido, en ocasiones he cambiado el montaje semi-fijo clásico por un “Chod Rig”, este tipo de montaje nos permite pescar con el bajo mas alejado del plomo, por encima de este, sin tener que alargar la longitud del mismo, y evitando así la presión del plomo, que podría hundir nuestro cebo en el cieno.

La inmensa mayoría de los pescadores que visitan el lugar, suelen utilizar el típico “hair rig” fabricado con trenzado flexible como norma general, y los resultados no acaban siendo los deseados casi nunca, provocando en muchas de las sesiones muchos toques, tirones, y falsas picadas en las cañas que desesperan al pescador sin obtener capturas, como ya hemos expuesto a la hora de hablar de los materiales, el trenzado aporta gran naturalidad al cebo y nuestros montajes son tomados y expulsado con mucha facilidad sin que las carpas se claven, más aquí, donde parece que todavía se alimentan de nuestros boilies con cierto recelo, por la abundancia de comida natural, para evitar estas situaciones y aumentar el porcentaje de peces clavados seria conveniente cambiar el tipo de bajo a utilizar.

Personalmente utilizaba estos tipos de bajos casi siempre, además de ser la opción mas económica y sencilla de realizar eran ideales para casi todos los tramos del rió que pescaba habitualmente, por sus fondos irregulares, con algas, vegetación y obstáculos, obteniendo con ellos resultados aceptables, sin embargo, cuando empezaron a llegar las primeras salidas de pesca a escenarios, en ocasiones mucho mas difíciles y presionados con carpas mas pescadas y “listas”, donde disminuía la densidad de picadas o ni siquiera se producían, era evidente que había cosas que cambiar, para engañar a estos peces y por supuesto los bajos era una de ellas, siempre que tengamos un fondo limpio y duro un bajo rígido utilizado correctamente clavara muchos mas peces por normal general, siempre es importante invertir tiempo en conocer la zona donde vamos a pescar, la morfología del terreno, profundidades, temperatura del agua…no habría que olvidar  entonces reconocer el tipo de fondo sobre el que vamos a pescar, un simple plomo atado en el extremo de nuestra línea, paciencia y mucha practica, nos pueden aportar las  pistas necesarias, y después obrar en consecuencia.

Uno de mis bajos preferidos, sin duda es el “Combi-rig”, fabricado con una combinación de flourocarbono  y trenzado en la parte del anzuelo y el hair, donde dependiendo del tipo de anzuelo que utilicemos normalmente redondos o curvados ligeramente, podemos añadir, un hair convencional o un sistema antirrechazo como la mejor opción, sin olvidar colocar un poco de masilla de tusteno en el nudo, podemos incluso utilizarlo para cebos flotantes consiguiendo el llamado efecto bisagra, presentando el cebo en una micro anilla entre dos topes sobre la pata del anzuelo para conseguir un mejor ángulo, cuando la carpa ataque el cebo, su eficacia es elevadísima, y desde luego es mi bajo para Monte la Reina, en la ultima visita a la charca, hace tan solo unos días, con mi amigo Antonio, conseguimos multitud de picadas y reducir los tirones prácticamente a cero utilizando estos tipos de bajos exclusivamente, un total de dieciocho peces de veinte picadas conseguidas en un solo DIA de pesca, todo un éxito.